Aulas de formación en un ambiente flexible, cercano y familiar

En definitiva, la formación continua es uno de los pilares de un programa de salud y bienestar laboral.

Gracias a la formación, los empleados adquieren nuevos conocimientos que les permiten actualizarse y adaptarse a los últimos avances en su sector. Y no solo eso... Este tipo de eventos sirven para salir de la rutina y favorecer la unión de los equipos, fomentando el espíritu de trabajo hacia un objetivo común. 

 

Hay una gran variedad de cursos de formación para empresas. Además de jornadas técnicas y de trabajo en equipo, las empresas pueden incentivar a sus empleados con sesiones de mindfulness y de técnicas de inteligencia emocional para combatir el estrés. 

Un curso de formación completo puede durar de un día a seis meses, dependiendo del tema y de los objetivos que se quieran conseguir. Las clases —o talleres sin son sesiones prácticas— pueden durar de dos a seis horas y la frecuencia puede ser semanal, quincenal o mensual. 

 

A continuación, explicamos los pasos que hay que seguir para organizar un curso de formación empresarial: 

Reuniones previas: el plan de formación debe satisfacer unas necesidades formativas. El análisis puede realizarse mediante encuestas directas a los trabajadores o entrevistas con los responsables de cada equipo o departamento. 

Diseño de la formación: debe contener una serie de aspectos básicos, como el tema, los objetivos, el público objetivo, la metodología, la duración y la forma de evaluación.

 

Elección de los docentes: es necesario elegir a los docentes apropiados y comunicarse con ellos antes del evento para que transmitan adecuadamente los objetivos del curso de formación. 

Lugar de la formación: organizar el curso de formación en las instalaciones de la empresa no suele ser la mejor opción. Cambiar de entorno tiene muchas ventajas, como por ejemplo una mayor concentración y motivación por parte de los asistentes. 

Calendario del curso: el curso de formación puede realizarse dentro o fuera del horario laboral. Hay que decidir la duración de cada sesión, la periodicidad y la fecha de cada jornada. Una vez creado el calendario, hay que comunicarlo a los docentes y a los asistentes con un plazo de tiempo suficiente para organizarse con tranquilidad. 

 

Diez días antes al comienzo del curso, es conveniente enviar un recordatorio informando del calendario, la ubicación, las opciones de transporte y las opciones de movilidad y de ocio en el lugar.

 

Es importante elegir un lugar adecuado para organizar un curso de formación. Una opción es trasladarse a una casa o a un centro universitario que cuente con amplios espacios, luz natural, tecnología avanzada y alojamiento. Este tipo de lugares ofrecen salas de conferencias y auditorios flexibles para adaptar la atmósfera al objetivo del curso de formación. Además, permiten realizar actividades de tiempo libre y explorar la zona una vez finalizada la jornada.